Entrevista Paco Cáceres
Fotos de archivo de José Castillo
A ver, anima a la gente para el paseo en el día mundial del medio ambiente, ¿qué se podrá ver, y disfrutar, el día 5 de junio en El paseo por la Vega de Cájar y la acequia del Jacín?
Creo que vamos a ver algo que va a sorprender a las personas que acudan, sobre todo a aquellos que piensan que en Cájar y en los pueblos de alrededor no queda Vega o que lo que queda son trozos de tierra a desaparecer. Lo que vamos a ver es cómo funciona el sistema hidráulico de la Vega de Granada. Cómo desde el siglo XI se hace el reparto del agua del Río Monachil entre las diferentes acequias que captan el agua de este río y, sobre todo, como se organiza y gestiona el riego en cada acequia. En este caso vamos a tomar como ejemplo una de ellas, la Acequia del Jacín, que es una de las tres acequias que riega la Vega de Cájar. Además de eso, vamos a ver un elemento hidráulico excepcional en Granada: el único molino andalusí que queda en la Vega de Granada. Hasta ahora se conocía como el Torreón del lunes, aunque las excavaciones recientemente realizadas han demostrado que no es un torreón, lo cual es crucial para la futura protección de este espacio tal y como podremos explicar in situ.
Aparte de lo lúdico y educativo, tiene un carácter reivindicativo. ¿Cuál es?
Efectivamente es así, queremos que se suprima de la modificación que actualmente se está haciendo del PGOU de Cájar la recalificación de una importante zona de Vega, precisamente aquella en la que está ubicado el molino andalusí. Y creemos que la mejor forma de hacerlo es que toda la ciudadanía, incluidos los representantes políticos de Cájar, conozca los excepcionales valores culturales de esta zona y sobre todo sus posibilidades económicas y sociales, razón ésta que es la que se esgrime para la recalificación, pues parece que hay interés en colocar ahí un centro comercial, lo cual es un absoluto despropósito desde el punto de vista económico, social, urbano y territorial, sobre todo si tenemos en cuenta la saturación de centros comerciales actualmente existente..y eso a la espera de que abra sus puertas el oscuro Nevada.
Si ahora, como vemos, no está protegida la Vega. ¿La protegerá, tal como nos vende, el Plan Especial de la Vega?
Pues a pesar de la insistencia de la Junta de Andalucía y de las campañas publicitarias lanzadas en este sentido, con la complicidad de la mayoría de partidos políticos todo hay que decirlo, lamentablemente el Plan Especial que están redactando en la actualidad no va a proteger en absoluto la Vega de Granada, sobre todo en esta zona de Cájar objeto de la visita, pues ni siquiera está incluida dentro de los límites del Plan en su actual redacción. Como muestra un botón: el Plan especial no puede ir en contra de lo que digan los PGOUs de las diferentes localidades de la Vega. Por lo tanto, si el Plan general de Ordenación Urbana de Cájar dice que eso no es vega y que hay que construir un supermercado, el Plan Especial no puede hacer nada.
Este paseo se une a otros organizados desde, sobre todo, La Zubia, Las Gabias... Además, con una amplia participación que oscila entre las sesenta y cien personas. ¿Por qué son interesantes estos paseos? Aparte del esfuerzo coordinador y difusor de la coordinación de El Abrazo y Somos Vega. Somos Tierra, ¿a qué crees que se debe esa amplia participación?
En primer lugar por el buen hacer, la honestidad moral y la credibilidad de todas las personas que estáis (que estamos, con perdón) en este colectivo de Somos Vega. Somos Tierra. Y en segundo lugar, porque creo que la gente cada vez está más concienciada e interesada por la Vega de Granada y por todo lo que ella supone: el valor de lo agrario, la importancia de un Medioambiente sostenible, el comercio de proximidad, etc. Es un espacio que siempre ha estado ahí, pero que no hemos sabido mirarlo ni apreciarlo. Lo que está haciendo El Abrazo es romper ese absurdo prejuicio que nos hacía renegar de nuestra propia identidad y empezar a valorar lo que tenemos y lo que somos.
La Vega Sur se está convirtiendo en un referente de organización y trabajo en defensa de la Vega, del río, de las acequias... ¿Qué valores patrimoniales y paisajísticos tiene este lugar de la Vega?
Sería muy largo contar todos los valores que tiene la Vega Sur, los cuales son compartidos con el resto de espacios que conforman la Vega de Granada: son numerosos y muy diversos valores culturales, históricos, sociales o naturales, todos ellos generados por la actividad agraria desde el siglo XI, lo que convierte a la Vega de Granada en un territorio excepcional y único en el mundo que se merecería la declaración de Patrimonio de la Humanidad. Dentro de estos valores, quizás la singularidad de la Vega Sur sea su mayor identidad y reconocimiento como tal espacio agrario de valor histórico, ya que se trata de una zona con unos límites muy precisos y de la que forman parte varias localidades, además de Granada, lo que le da una dimensión territorial muy clara a pesar de la cercanía con la capital. Y quizás también el hecho de que en el centro de la misma esté el histórico Pago de Darabenaz, del que quedan importantes vestigios como el Cortijo de la Marquesa, la Huerta de la Muharra o la Casería Checa.
El día 6, después de la ruta por la Vega de Cájar y el Jacín hay un encuentro que dentro del proyecto El Abrazo, y bajo el título “El Monachl nos une” quiere trabajar por la sostenibilidad de los municipios que hay en el entorno del río Monachil. ¿Qué papel crees que debe jugar el patrimonio agrario en El Abrazo y en el “Monachil nos une?
Pues creo que debe ser mucho, pero por un hecho esencial que no podemos perder nunca de vista cuando actuamos en la Vega de Granada: todas las iniciativas que podamos poner en marcha en torno a la actividad agraria en este espacio, sean productivas, sociales, terapéuticas, culturales o de ocio se tendrán necesariamente que hacer sobre un espacio, el conformado por las diferentes vegas o zonas irrigadas por las acequias que se nutren del Río Monachil, que ha sido construido desde hace mil años y que sigue funcionando de forma muy semejante al momento originario y con sus mismos elementos constitutivos (acequias, caminos, sistema de riego, cultivos, etc.). Sería como decir: qué papel tendría el patrimonio histórico en la recuperación del Albaicín: pues todo, ya que vamos a trabajar sobre un espacio que en sí mismo y de forma integral es Patrimonio Histórico. Pues con el Monachil sucede algo parecido. Concienciar a la gente que trabajamos, que paseamos, que cultivamos, que comemos de un espacio histórico excepcional sería un papel fundamental a desempeñar por el Patrimonio Histórico en este proyecto.
Todo esto, lógicamente, sin olvidar el resto de elementos patrimoniales tanto culturales como naturales generados en torno al río Monachil y que tienen un valor extraordinario como el excepcional yacimiento argárico del Cerro de la Encina, cuyas posibilidades de puesta en valor son múltiples y de gran interés.
Agradecemos a José Castillo el que haya respondido a las preguntas de otragranada.org y animamos a todos a participar en este paseo en el que, aparte de disfrutar del paisaje, podremos conocer los múltiples valores de la Vega, su riqueza, historia... Una lección para recordar.
